domingo, 22 de agosto de 2010

Gerardo Manuel Y Los Doltons



Por Gerardo Manuel

Mis queridos lectores, en esta oportunidad les voy a pedir licencia para contarles algunas cosas muy personales. Compartirlas es reforzar el valor que tienen por sí solas, sobre todo si están enfocadas dentro de ese vinculo que nos une y que es LA MÚSICA.

En los albores de la década del 60 se gestó entre nosotros un movimiento musical que había sido sembrado en la segunda mitad de los 50. Los protorockeros, habían seguido las huellas de bandas como Bill Haley & His Comets, Buddy Holly & The Crickets, solistas, como Paul Anka, Neil Sedaka y otros artistas no menos importantes, incluyendo por supuesto a Elvis, Chuck Berry y Little Richard, a los que ya de por sí es innecesario nombrar pues todos los llevamos en el ADN.

Hago esta analogía entre la amistad y la música porque en los 60 toda la gente que compartía la nueva música pertenecía a una extensa cofradía que difícilmente alcanzaría el tiempo necesario para que todos se conocieran entre sí. Sin embargo surgió una forma de aumentar esa posibilidad de acercamiento cuando muchos de sus integrantes se animaron a formar parte de algún un grupo musical. Así surgieron amistades que se consolidaron con y a través del tiempo al margen de los años transcurridos.

En el verano de 1964 fui invitado a un programa de aficionados que se transmitía vía canal 2, entonces Victoria Televisión, cuyo local quedaba en el edificio Cavero Dubois de la avenida Tacna y que luego se convirtió en el cine Imperio. Era uno de los canales que se perfilaba como el más moderno y funcional de su época por sus instalaciones y la calidad de sus producciones. El programa en mención se llamaba “El Show de Sergio” y era conducido y producido por un ciudadano chileno pero peruano de corazón que también era discjockey en una radioemisora adjunta a la empresa Cavero, la conocida Radio Victoria. Sergio Vergara fue uno de los primeros en impulsar el talento nacional a través de sus dos espacios y a la vez era uno de los pioneros en primicias musicales de todas partes del mundo.

En una de las emisiones de “El Show de Sergio” conocí a cuatro muchachos que no eran George, John, Paul y Ringo, sino más bien Tito, Javier, Walter y Fernando, quienes me propusieron formar un grupo musical con ellos y en el que yo sería el cantante. Después de varios ensayos ya estábamos listos para emprender esta aventura musical que se transformó en una banda legendaria en la historia de la música nacional: Los Doltons. En nuestras idas y venidas por canales de televisión, emisoras de radio y actuaciones en vivo en las recordadas matinales, ingresa como una suerte de sexto integrante de la banda un gran amigo, con una voz estupenda y con el cual desde el comienzo quise formar un dúo, al cual le pusimos tentativamente el nombre de “Tom & Jerry”. Este amigo, con el cual nunca llegué a cantar en esa época de manera oficial, es el gran César Ichikawa, quien por circunstancias muy especiales se quedó como cantante de los Doltons cuando los Shains me propusieron grabar con ellos su primer LP. No pudo quedar en mejores manos este lugar en los Doltons pues, al margen de la calidad musical que tenían los muchachos, César poseía un gran registro vocal y una simpatía muy especial para el estilo musical que se propusieron seguir.

Publicado en el blog Disco Club

César Ychikawa y Los Doltons



En términos musicales, la Nueva Ola Peruana significó la llegada de una nueva tendencia; la aparición de un buen número de cantantes y conjuntos nacionales que rápidamente se ganaron el aprecio del público y se convirtieron en ídolos, especialmente de los jóvenes.

En medio de este contexto aparecen Los Doltons, el grupo que con el correr de los años se convertiría en el más importante de la década de los 60, y cuya grandeza se expresa a través de sus canciones que aún se escuchan en las radios locales a pesar del tiempo transcurrido.

Y cuando se habla del conjunto es inevitable mencionar a César Ychikawa, el vocalista, porque a partir de la presencia de este cantante nissei, el grupo comenzó su carrera ascendente hasta conseguir el ansiado renombre.

César nació en 1946 y es el último de los hijos de Yoshimura y Toshiko Ychikawa, inmigrantes procedentes de Yamanashi. Debido a la precaria salud de su esposa, Yoshimura Ychikawa decidió salir de Lima y encontró en Huancayo el lugar ideal para establecerse. Mientras tanto, el pequeño César permaneció en Lima y quedó al cuidado de su tía Maki.

La infancia en Huancayo

A los cuatro años César viaja a Huancayo, ciudad en donde pasaría su niñez y parte de su adolescencia. Allí, encontró una presencia importante de japoneses y una prueba de ello era la formación de clubes de jóvenes. Sin embargo, por razones de edad, él no formaba parte de estos grupos.

El clima de la sierra con sus tardes de lluvia y el frío reinante mostraban un escenario triste en su vida. Refugiado en la casa de la calle Piura, sus actividades se limitaban al juego familiar, a leer los comics de la época y alguna salida al cine. Este tipo de vida estimulaba en César la llegada del verano porque en esas temporadas regresaba a Lima para visitar a sus familiares e ir a la playa

Pero el arte de la música ya empezaba a correr por sus venas. Con sus hermanos en Huancayo solían organizar veladas artísticas para sus padres, además César había aprendido a tocar el acordeón, la armónica, el rondín y además cantaba en el colegio. Todo lo aprendió por cuenta propia, y él mismo afirma: "creo que uno nace con eso, porque desde chico sentí una especie de atracción".

En su casa casi no se escuchaba música en japonés sino preferentemente aquellas canciones que un allegado a la familia llevaba al hogar de los Ychikawa. Pero éstas no eran contemporáneas a la edad de César y por ello creció escuchando los boleros de Los Panchos, algunos tangos, temas de Glen Miller y todas aquellas canciones que escuchaba a través de Radio Huancayo en las tardes mientras hacía sus tareas del colegio.

Para culminar su secundaria, retornó a Lima y fue matriculado en el colegio San Andrés. Allí no tuvo tiempo para establecer grandes amistades debido a que los grupos de amigos ya estaban formados desde hace varios años. Ser callado y tranquilo hizo que buscara amistad en dos o tres amigos solamente, por lo que años más tarde cuando se hizo conocido con Los Doltons, algunos compañeros de aula no podían creer que aquel "chinito" que deleitaba con su melodiosa voz fuera el mismo que habían conocido años atrás.



La universidad y el inicio de su historia musical

Ingresó a la Facultad de Economía de San Marcos en 1964 y a partir de ese momento comienza su historia musical. En lo personal experimentó algunos cambios. Poseía una mayor madurez emocional y se encontraba más adaptado al ambiente limeño. Por eso no fue extraño que formara parte del coro de la universidad, y como miembro de éste, viajó a un festival en Chile en donde recogió bonitas experiencias por el ambiente de camaradería que le tocó compartir. En la clausura del festival, César recuerda que cantó canciones de rock de manera espontánea.

Tuvo como compañero de clase en la universidad a Javier Román, quien lo invitó a asistir a los ensayos con algunos amigos que vivían en Breña y se hacían llamar Los Doltons. Estos eran Roberto Andía, Gerardo Manuel Rojas, Fernando y Walter Bolarte. César aceptó y quedó fascinado desde el primer momento. Esto hizo que sus visitas continuaran y se extendieran hasta acompañarlos en algunas presentaciones. Además, al lado de Los Doltons, entre broma y broma, se animaba a cantar algunos temas, especialmente los de Palito Ortega.

El alejamiento de Gerardo Manuel Rojas, en ese entonces vocalista del conjunto, le abrió la posibilidad de convertirse en el nuevo cantante. Pero esta nueva faceta no le gustó al papá de César y menos aún cuando él y los demás integrantes le pidieron un préstamo para comprar unos amplificadores y guitarras. El préstamo se hizo efectivo, pero previo a ello tuvieron que escuchar un interminable sermón.

Se presentaron ante empresas musicales para grabar un disco y después de muchos intentos fallidos, Los Doltons fueron aceptados para una audición en Sono Radio, días después recibieron la respuesta afirmativa. El primer disco grabado fue un sencillo con los temas "Visión de Otoño" y "Rey Tablista".

El éxito llegó rápidamente

El éxito alcanzado con este disco se constituyó en el primer peldaño de una carrera promisoria e inmediatamente hizo que sus vidas cambiaran. Comenzaron a ser reconocidos y en el escenario se hizo una costumbre escuchar los gritos de la gente proferidos por sus admiradoras.

Las visitas a los programas radiales de Brani Zavala en Radio Atalaya y Enrique Llamosas en Radio Miraflores se multiplicaron, la gente que los escuchaba quería conocerlos y recogiendo el clamor popular, el conjunto comenzó a presentarse en los programas "Cancionísima" con la conducción del recordado Pablo de Madalengoita y la "Revista de los Sábados".

En aquella época ante el escaso número de medios de comunicación, la teleaudiencia se centraba en aquellos programas, por lo que la popularidad del conjunto subió como la espuma, al punto que Panamericana Televisión los contrató como artistas exclusivos por dos años. También son recordadas las matinales de los domingos organizadas por los colegios con presentaciones en los cines Excelsior, Tauro, entre otros. Y tampoco pueden dejarse de mencionar las veces que cantaron en el "Majestic" para los miembros de la colonia peruano japonesa.

Grabaron cinco discos de larga duración lo que representó un amplio repertorio y la mayoría de ellos se convirtieron en grandes éxitos. Temas como "Gloria", "Tema: El Amor", "De Repente Tú Me Amas", "Mi Día Vendrá", y por supuesto, el más conocido de todos "El Último Beso", son las canciones más representativas de este conjunto que rápidamente impactó en el público convirtiéndolos en sus favoritos.

Pero no sólo cantaron en español. Uno de sus temas, "Estrella en la Noche", fue una adaptación de la canción japonesa "Umi Sono Ai" del popular cantante Yuzo Kayama. Cuando la escucharon, Los Doltons decidieron presentarla a Enrique Lynch quien dio el visto bueno para su grabación. El producto final fue un tema, mitad en japonés y la otra en castellano.

Si bien es cierto que el grupo estuvo formado por cinco personas, la figura de César Ychikawa resaltó sobre los demás. Él aporte entregado se basó en su personalidad como vocalista. Al respecto, Walter Bolarte integrante de Los Doltons señala: "Su tono y entonación eran perfectos, aunada a la personalidad que infundía en cada tema. Él no interpretaba los temas en forma mecánica; siempre en cada ocasión, me percataba que lo hacía cada vez mejor, es decir que para él, interpretar un tema era focalizarlo como si fuera la primera vez".



El fin de una etapa y el inicio de otra

César, al igual que algunos miembros del grupo, sabían que la música era un hobby y una actividad paralela a los estudios universitarios. Por eso, estaba cantado de antemano que al dejar la universidad llegaba el momento de decirle adiós al conjunto. Además, la actividad desplegada en esos años fue muy intensa y terminó minando las ganas de continuar.

En una de sus últimas presentaciones en el cine Roma, el propio César admite que mientras cantaba ya no le encontraba sentido a lo que hacía, preguntándose:¿Qué hago aquí?.Por eso, a pesar que el termómetro de la popularidad señalaba que la fiebre por el grupo continuaba, este no fue suficiente para evitar el final anunciado.

Ychikawa tenía planeado viajar al extranjero para practicar comercio internacional y así lo hizo. En 1969 viajó a Estados Unidos en donde permaneció ocho meses. Posteriormente viajó a Japón, lugar en donde sintió el impacto de conocer un país tan diferente al Perú. Volvió a finales de 1972 con la idea de cerrar para siempre el capítulo del canto.

Sin embargo, años más tarde le propusieron la idea de grabar un disco del retorno con Los Doltons. Pero en ese momento no se encontraba Enrique Lynch y la compañía Sono Radio no le puso interés al proyecto. A pesar de ello, el disco se grabó pero los resultados no fueron nada satisfactorios.

A partir de allí en adelante César transitó por caminos diferentes a la música, pero como todo artista no le pudo dar el adiós definitivo. Así, en una oportunidad Yoshi Hirose lo animó a participar en el homenaje a John Lennon, lo cual aceptó y al momento de aparecer ante el público tuvo un cálido recibimiento.

Esta presentación fue una especie de antesala a su reencuentro con Los Doltons en 1999 en un concierto realizado en el Teatro Peruano Japonés. El proyecto le encantó porque le pareció bastante serio y todo caminó de acuerdo a lo planificado.

Demás está decir que este reencuentro significó un éxito rotundo al punto que en un inicio se pensó realizar dos presentaciones, pero las ganas del público por ver a sus ídolos obligaron a los organizadores a programar actuaciones adicionales.

Han pasado más de cuarenta años desde que unos jóvenes decidieron incursionar en el mundo de la música y alcanzaron el éxito. En el caso de César Ychikawa, su paso por Los Doltons significó un cúmulo de experiencias enriquecedoras, siendo las más gratificantes el cariño que hasta hoy le profesan sus admiradores, personas que encontraron en el grupo el modo de expresar sus sentimientos. Y a pesar de los años transcurridos, el aprecio, la emoción por ver a un ídolo de su juventud se mantiene porque cantarle al amor no pasa de moda y además como el propio César Ychikawa define:" El alma no tiene edad".

Publicado en Prensa Nikkei

miércoles, 11 de agosto de 2010

El Rock Enfermo de Los Yorks

Foto La República


Por Jona Castro

Cuando estaba en el colegio, una amiga me comentó que su papá había sido guitarrista de “Los Yorks“, la mejor banda de rock peruano entre los años 1968 y 1971 (título otorgado por la Cacodispe, aparte de un disco de oro). Desde aquella vez quise entrevistarlos.
Los Yorks destruían cada cine en el que se presentaban. Impresionaban y daban miedo, hipnotizaban y reventaban tímpanos. Se presentaban en televisión, en canal 4, “El Show de Elena Cortéz”. Una lástima que todas las cintas que se grabaron de ellos fueron reutilizadas, como me lo comentó Rulli Rendo hace poco, durante la dictadura militar. Y las cintas que quedaron fueron llevadas a un almacen en Ancón donde la húmedad hizo lo que mejor sabe hacer: jodernos a los limeños.
Si bien en los últimos años se ha dado un redescubrir del rock peruano de las décadas de 1960 y 1970, dos eventos han revitalizado a los Yorks. El primero es la edición de un compilado de los mejores temas que grabaron entre 1967 y 1974 hecho por Munster Records en España. Y el segundo es la edición del libro “Demoler”, de Carlos Torres Rotondo en la que narra un capítulo sobre la historia de estos 5 tipazos.
A raíz del catastrófico reportaje sobre la historia del rock peruano que hizo Punto Final, contacté con Román Palacios (ex guitarra), y de ahí con Pacho Aguilar (ex batería), Jesús Vílchez (ex bajo) y Walter Paz (ex guitarra). Una lástima que Pablo Luna (ex vocalista) se encuentre en España

Entrevista - Parte 1


Entrevista - Parte 2

Tocadisco: Los Yorks

En la segunda mitad de los años 60, cinco veinteañeros rompieron la escena local del rock con un estilo eléctrico y contagiante. Una compañía española los ha redescubierto y relanzado a lo grande en Europa y EEUU.






Por Ángel Páez

¿A quién se le ocurriría desempolvar la música de una oscura banda peruana de los años sesenta cuyos ex integrantes están hoy más preocupados por los nietos que por recordar la época de locura, desenfreno y exceso que protagonizaron bajo el nombre de Los York’s?

Pues se le ocurrió a la reconocida disquera española Munster, que ha cumplido un cuarto de siglo publicando exquisiteces. "Qué bendición: todavía salen discos que te abren panoramas desconocidos. Que te cambian la perspectiva que tenías de un país y una época.

Y que son, fuera de toda consideración historicista, puro deleite", escribió Diego A. Manrique, el reportero especializado del diario madrileño "El País", celebrando el lanzamiento por todo lo alto de Los York’s: El Viaje 1966-1974. Munster dio en el blanco. Los York’s ahora son de culto.

No fueron la primera banda de rock en el país pero sí fue la primera que hizo verdadero rock. La policía siempre buscaba un pretexto para penetrar en los locales donde tocaban Los York’s y acabar a empellones con la fiesta.

Uno de las más importantes distribuidores de rock independiente de Europa, la británica Shell Shock, recomienda a Los York’s como "una de las bandas más salvajes de Sudamérica, una de las más famosas y exitosas en el Perú, más que Los Shain’s o Los Saicos". Los 21 cortes de la antología publicada por Munster es solo una pequeña muestra de los tres álbumes y 25 sencillos que editaron en su breve vida. Suficiente para desasnar a quienes creían saberlo todo del rock nacional. Los que remecieron los años 60 ahora frisan los 60 años.

LA VIDA ES HOY

La estrella de la agrupación se llama Pablo Luna Mansilla, nacido en La Victoria, un afroperuano de cabello rojizo, vecino de Ancón, quien luego del fracaso de su restaurante "Pablo’s", el año 2000, viajó a Madrid llamado por su familia. Allá trabaja en seguridad privada. El pasado 27 de febrero cumplió 62 años. Luna era capaz de cantar una balada sensualísima y luego transformarse repentinamente en un poseso. Se contorsionaba mientras interpretaba los números más reclamados por el respetable, a veces reventando a patadas los focos y fluorescentes del escenario, o haciendo añicos los micrófonos. El público saltaba de sus asientos y le seguía la corriente. A ese estado de paroxismo se le conocía como "La enfermedad". Y la contagiaban como nadie Los York’s.

Aunque cambiaron frecuentemente de integrantes, la formación básica del combo, además de Luna, la conformaban los guitarristas Román Palacios Moreno y Walter Paz Rodríguez, el bajista Jesús Vílchez Gárate y el baterista Pablo Aguilar Salazar. Román Palacios, de Pueblo Libre, es promotor educativo y publicista, abuelo de un nieto y cumplirá 60 años el 24 de agosto.

Era el que le hacía los efectos a la guitarra que caracterizaban a Los York’s. "Usaba una moneda de un sol. Dicen que ese sonido era de los Velvet Underground pero jamás los había escuchado", dice. Román es el único que intervino en los tres álbumes oficiales. Si hasta diseñó el logotipo del grupo con gutapercha negra. Palacios es quien promovió que Los York’s rompieran contrato con la disquera MAG y ficharan con El Virrey por la fabulosa suma de 200 mil soles de la época.

Walter Paz, profesor de música y periodista, nacido en el Rímac, el ocho de agosto llegará a los 56 años. "Hasta ahora se sigue diciendo que Los York’s son del Rímac pero yo soy el único de ese distrito", afirma.

Era el más joven de los cuatro y hacía de segunda voz. Uno de los expertos en el rock peruano de los sesenta, Arturo Vigil, quien tuvo el privilegio de escribir el booklet de la antología publicada por Munster, se refiere de Paz así: "Aportó con su ejecución un color y un sonido particular, quizás por su formación musical y admiración hacia la música negra en general y el rhythm and blues en particular".

Pablo "Pacho" Aguilar Salazar, el baterista, también nació en La Victoria. El 15 de enero completó los 61 años. Es uno de los que fundó el grupo en 1965. Cuenta que se equivocan quienes afirman que Los York’s es una alusión a la Gran Manzana, pero lo cierto es que se llamó así porque el cantante original usaba el nombre artístico de Willy York."Debutamos en el cine Venecia el 27 de julio de 1965. El cantante era Meter Ryder, pero fue reemplazado por Pablo Luna, quien era obrero en una fábrica de Vitarte", afirma Pacho Aguilar. Tenía una batería Roxy con la que hacía espectaculares solos en los conciertos en vivo.

A la Residencial Grau de La Victoria la llamaban "Liverpool chico" porque de allí salían varios rockeros como Jesús Vílchez Gárate. El 25 de diciembre cumplirá 60 años. Después del éxito con Los York’s también tuvo suerte como diseñador industrial. Se hizo famoso por la línea de ropa Ayllu y New Ayllu. Palacios, Paz y Aguilar se burlan de la calva de Vílchez porque en los años sesenta lo conocían como "Aceitillo", por su afición a untarse grasa en su profusa cabellera. Vílchez era de la competencia: pertenecía al grupo Los Rattles. Román Palacios lo recomendó para reemplazar a Pepe Olivera. Se bautizó con la grabación del sencillo "Vete al infierno".

Los cuatro coinciden en que uno de los momentos más memorables que vivieron fue en 1968, cuando protagonizaron con Los Shain’s una "batalla de bandas" en el cine Ídolo, de Pueblo Libre. La lucha de dos horas y media parecía que había terminado cuando el presentador Enrique Llamosas anunció que se había producido un empate. La gente rugió descontenta.Llamosas tuvo que corregir y decir que Los York’s eran los vencedores. El local se vino abajo. El grupo ya era leyenda.

domingo, 8 de agosto de 2010

Los Datsuns



Ahora vamos hasta Perú. Este grupo, una de mis favoritas, nació entre los años 1964 y 1965 en Huancayo. Lamentablemente no hay muchos datos de ellos. He podido recopilar algo de esa banda y espero satisfacer a los amantes de este grupo y a los que quieran conocerlos. De seguro les gustara esta banda.

Una curiosidad de este tiempo es que muchos grupos decidieron colocar como nombre algo relacionado con los autos, tal es el caso de Los Mustang, Los Impala, y este caso Los Datsun`s.

Por lo que se ve, el rock en el Perú no solo era en Lima, también tuvo mucha fuerza en Huancayo, donde destacan junto a otras bandas. Inicialmente, su nombre fue “Los Landers”. Sus primeros temas fueron “Demolición”· ( Los Saicos) y “La Bamba” (Los Frack’s), allá por los años 1964.

Sus integrantes en ese entonces fueron:

Hualther Huanca - Voz
Ángel Montes Soto José Cartagena – Guitarra
Roque Monte Soto – Guitarra Rítmica
José Cartagena – Bajo
Octavio Cartagena – Batería

Octavio se fue a Huancavelica a seguir con sus estudios. Se hace un cambió al grupo en los integrantes, y se cambia de nombre a “Los Sichers” ( el nombre fue por las iniciales de Santa Isabel Cuna Histórica de Estudiantes Revolucionarios). Los integrantes son los siguientes:

Fredy Rodríguez – Batería
Ángel “Washi” Montes – 1º Guitarra
Lucho Flores – 2º Guitarra
José Cartagena - Bajo

Posteriormente se une, en reemplazo a José Cartagena, Ciro Baquerizo (se dice que éste fue en un tiempo el amigo y bajista de “Los York’s”). José Cartagena conoce a un amigo, que la cual tenia instrumentos y sabia manejar la guitarra. Un día, su profesor le prometió algunos puntos extras si la banda “Los Lander´s” se presentan en la fiesta del colegio. José acepto. Y la nueva banda fue así:

Claudio Huanta - Voz
Jose Cartagena – 1º Guitarra
Maita? - 2º Guitarra
Hualther Huanta – Bajo
Jesús Hurtado – Bateria

Vuelve Octavio a Huancayo. La banda tiene los siguientes cambios:

Claudio Huanca - Voz
José Cartagena - 1ra Guitarra y Coros
Jesús Hurtado - 2da guitarra y Coros
Hualter Huanta - Bajo
Octavio Cartagena - Batería

Ya con esta banda comienzan a participar en concursos de Go go que hacia el Radio Huancayo. Estamos en los inicios de 1967. Claudio y Hualther trabajaban en una distribuidora de maquinarias y que el administrador de dicha empresa quería al grupo para la Exposición de Carros , donde cada uno saldría a tocar encima de un carro. Y dicho y hecho, el concierto se hizo.

Poco a poco el administrador se convirtió en su representante, el fue Luís Makino Cerron. Le gustó tanto la presentación que los habilitó una parte del local. Al poco tiempo, Luís propuso el nombre de “Los Datsun’s”, a cambio de tener algunas presentaciones en Lima y nuevos instrumentos. Se aceptó el nombre.

Tuvieron presentaciones en Jauja, en la cual fueron muy ovacionados. Ganan el Primer Festival Nacional en Arequipa. Viajan a Lima donde tocan junto a varios grupos, pero el mas anecdótico fue con Los York’s , en el Coliseo Cerrado de Puente del Ejercito.
Graban un EP, en cual graban un tema de Los Iracundos y el otro propio(“Te he de encontrar”/ “Triste Adiós”. Años mas tarde, comparten escenario con Los Iracundos.

En 1969 se fueron de gira a Huanuco, Cerro y La Oroya.

En 1970, viaja a EEUU Jesús Hurtado y en su ausencia lo reemplaza Washi Montes.
La banda tuvo un acompañamiento en el órgano, la cual estuvo a cargo de Coco Bentacour y Otto de Rojas, pero en sus inicios estaba a cargo de Beto Mieses, luego Arturo Vildosola. El ultimo es Elvis Bartra.

En el año 1972 el grupo se desintegra. En el 1974 se vuelven a junta, pero con el nombre de “La Gran Familia”, pero el estilo había cambiado, ya no era rock sino cumbia y salsa. (Después de la separación de la banda, en Huancayo se impuso, en vez del rock, la cumbia y salsa.)

José Cartagena se retira por diferencias en el estilo musical, y lo reemplaza Raúl Herrera, de Los Belking’s. José Cartagena se retira a Lima, y allí se reencuentra con Willy Pizarro. De allí se reúnen una o dos veces al año para a recordar esos tiempos.
Actualmente Jesús Hurtado es docente en la UNCP, Claudio Huanta se dedica a la música como solista, Huather Huanta es representante del grupo conformado por dos de sus hijos.

Tomado del blog "Rock en Español"

Los Datsuns (su MySpace)




Los Datsuns tienen sus antecedentes de formación a inicios de la década de 1960, con la inclinación musical de jóvenes que promediaban los 15 a los 20 años de edad, estudiantes de los colegios secundarios: Claretiano y Santa Isabel de Huancayo, que inicialmente formaron los primeros grupos de rock en la Ciudad de Huancayo y el Valle del Mantaro, estos fueron: “Los Deer Boys” y “Los Landers”, formados en el año 1964.

Para 1966 Jesús Hurtado (“Deer Boys”) y José Cartagena (“Los Landers”) deciden reunirse para practicar música, siendo invitados a presentarse en el recital de 1966 por el aniversario del Colegio Nacional Santa Isabel de Huancayo, bajo el nombre “Los Landers”, porque aún no se tenía el nombre para este proyecto que posteriormente con el ingreso de Octavio Cartagena (baterista) y la salida de Rodolfo Mayta (guitarrista), vendrían a denominarse “Los Datsun..s” con su alineación completa, hasta nuestros días.

En 1967, Walter y Claudio Huanca llegan a laborar en la empresa “Maquinarias S.A.”, distribuidora de automóviles “Datsun”, y junto con Jesús, Octavio y José proponen a Luis Makino Cerrón representante del grupo y distribuidor de Maquinarias S.A. tomar el nombre de la firma Datsun a cambio de instrumentos y equipos, tras la aceptación de los propietarios de la firma en Lima, , el grupo que se presentó en 1966 como “Los Landers”, pasó a denominarse “Los Datsun..s” en 1968 con la alineación siguiente: José Cartagena en la primera guitarra, Jesús Hurtado en la guitarra rítmica, Octavio Cartagena en la batería, Walter Huanca en el bajo y Claudio Huanca en la voz.

En los años siguientes se realizaron una serie de presentaciones junto a grupos de rock como: "LosFracks", "los Sichers", "Speed 66, “Scorpions”, “Los Gatos Negros”, “V Rebelión” en Huancayo, “Spiders” en la Ciudad de Jauja, “Extraña Dimensión” en la Ciudad de Tarma, “Volders” en Concepción, y “Los Feos” en la Oroya entre otros. En 1968 Los Datsun..s graban su primer 45 rpm "Triste Adios" composición de Jesús Hurtado y "Te he de encontrar" de Mario Pizurno siendo este la primera grabación de un grupo de rock de provincia a nivel nacional.



En 1968, “Los Datsun..s”, reciben el premio “Disco de Oro”, otorgado por Luis Aguilar de “Radio Callao”, en merito a la popularidad del tema: “has de ser mi mujer”, grabado en 1968. En Marzo de 1969, “Los Datsun..s”, graban su primer Lp, grabado en dos tardes en la Ciudad de Lima bajo el sello LIDER - IEMPSA y editado con el nombre de “Ritmo y movimiento Entre 1970, retorna a Huancayo Jesús Hurtado (guitarrista de los Datsun..s) tras un viaje de estudios hecho a Estados Unidos, trayendo discos de grupos de rock que no llegaban al Perú y mucho menos al Valle del Mantaro (luego vendría una “fiebre” por tocar temas en inglés), además de una guitarra marca: “Gibson” (una de las pocas que hay en el Perú hasta el momento), con su respectivo amplificador, entre otros equipos.

En Agosto de 1971, “Los Datsun..s”, ganan el primer festival de música juvenil en Arequipa, frente a grupos de Lima, Cuzco, Trujillo, Ayacucho y Arequipa. A fines de 1974 deciden hacer un paréntesis en su vida artística. En 1976, “Los Datsun..s”, se reagrupan bajo el nombre “La gran Familia”, sin embargo en 1979 José Cartagena se retira del grupo en su reemplazo, entre otros llega Raúl Herrera, primera guitarra de “Los Belkings” 1983 - 1986.

En 1990, “Los Datsun..s”, se presentan junto al grupo: "Los Doltons" y posteriormente en el año 1992 junto a “La V rebelión” por su aniversario en el Coliseo Huanca. En 1992, la Municipalidad de Huancayo entrega al grupo de rock “nuevaolero” “Los Datsun..s”, un diploma de reconocimiento nombrándolos “Los Caballeros de la Música” y en junio de 1994, la misma Municipalidad los declara como “Patrimonio Cultural de la Ciudad de Huancayo”, por sus triunfos y difusión de la cultura musical llevando el nombre de la Ciudad de Huancayo a sitiales reconocidos a nivel nacional e internacional.

Actualmente, "Los Datsun..s", muy fortalecidos y con mucha más energia que proviene desde la decada de los sesenta y con muchas más pilas se retroalimenta realizando presentaciones con sus integrantes originales. Celebramos la magia y pasion por la musica que cada dia se viene escribiendo manejando los intrumentos como lenguaje para dar a conocer las recientes novedades ...

Tomado del Myspace de Los Datsuns