miércoles, 30 de octubre de 2013

We All Together: la banda más popular de los 70



La banda peruana regresa con "Singles", disco que recopila todos los sencillos que sacaron después de su segundo disco. Esta es una conversación exclusiva con los integrantes originales.

Mucha gente no sabe que la historia de We All Together empieza en 1965, cuando Saúl y Manuel Cornejo forman New Juggler Sound, banda influenciada por la invasión británica liderada por Yardbirds y Kinks. El grupo compuesto por los dos hermanos, que tocaban guitarra y batería, incluía además al percusionista Alex Abad, al guitarrista Alberto Miller y al bajista Eddy Zarauz, quienes solí­an presentar sus canciones alucinadas y agresivas en los colegios y galerí­as de arte de la Lima de los años 60.

Félix Varvarande: Yo era un fanático y un seguidor de los New Juggler Sound. Ernesto Samamé, que habí­a tocado con Gerardo Manuel en su disco Machu Picchu 2000, venía a mi casa a tocar y a fumar marihuana, y con él nos metí­amos a las fiestas donde tocaban. Cuando se tuvo que decidir qué grupo tocarí­a en mi fiesta de promoción, yo pedí­ que tocaran ellos. Muchos años después, cuando ya tocaba con Manuel y Saúl en We All Together, les hablé de canciones que yo había escuchado en ese concierto y que ellos no habían vuelto a tocar. No sabes lo buenos que eran esos temas.

Saúl Cornejo: A veces los mejores temas no se llegan a grabar porque uno acaba eligiendo lo que le gusta a la mayorí­a.

En 1969, tras sacar dos 45 con RCA/Victor, la banda se muda a MAG, disquera y estudio de Manuel Guerrero, empresario con papel fundamental en esta historia. Después de un cambio de integrantes (sale Miller y entran el más psicodélico David Levene y Carlos Salom en el órgano Hammond), los Cornejo empiezan el proyecto de Laghonia, banda que muchos consideran la mejor del Perú de esos años.

Carlos Guerrero: Mi viejo era ingeniero de minas, pero también tenía algunas tiendas. En 1952, cuando alguien le encargó unos discos empezó a meterse en el negocio de la música y acabó haciendo MAG.

Saúl Cornejo: El ingeniero Guerrero era un aficionado a la música que admiraba mucho el sonido extranjero. Su estudio era el mejor de esa época. Yo aprendí­ mucho de él, después de grabar nos quedábamos haciendo pruebas, probando micros, experimentando. Así­ acabé trabajando de ingeniero de sonido en MAG.

Mientras grababan su segundo larga duración Laghonia se desmoronó. Los hermanos Cornejo y Carlos Salom terminaron de grabar el disco con la ayuda de Ernesto Samamé, que entró como reemplazo de Eddy Zarauz.

Carlos Guerrero: We All Together nació de casualidad. Yo acababa de regresar de Estados Unidos y ellos estaban terminando de hacer un disco de Laghonia. Una tarde entré a MAG y empecé a jugar con las mezclas de sus grabaciones, los ayudé con las voces de algunas canciones y así­ hicimos una amistad. Pero no creo que We All Together sea una consecuencia de New Juggler Sound o Laghonia.

Saúl Cornejo: Laghonia se desintegró y Carlos nos propuso grabar con él dos temas de Paul McCartney, como un experimento. No habí­a intención de hacer una banda.

Carlos Guerrero: Grabamos Some People Never Know y Tomorrow. El 45 empezó a sonar en las radios y funcionó.

Félix Varvarande: Una tarde Ernesto me vino a buscar y me enseño una grabación que habí­a hecho en MAG. Era Some People Never Know. Aunque él no tenía idea del futuro de We All Together, sabía que la grabación era impecable. Cuando la canción empezó a sonar en la radio, la gente pensó que no eran peruanos.

Saúl Cornejo: Los estilos musicales de Laghonia y We All Together eran muy distintos. Laghonia era más progresivo, experimental y solo tocaba temas propios. Además, We All Together no era un grupo de conciertos, en total solo tuvimos dos actuaciones.

Carlos Guerrero: Nuestro segundo 45 era dos versiones de Badfinger, "Carry On" y "Walking In The Rain". Lo grabamos con gente de la Sinfónica Nacional y lo presentamos en Radio Miraflores, y antes de que acabara de sonar la gente ya estaba pidiendo que lo pasaran otra vez. Llegamos a vender 50,000 copias. Entonces decidimos seguir con We All Together y grabar el disco con la portada del árbol. La gente decía que ese árbol era lo que fumábamos, pero solo era una foto que encontramos en una caja que tení­a mi viejo; no habí­a ningún significado oculto.

Saúl Cornejo: La portada original iba a ser un dibujo de nosotros con bolsas en las cabezas.

Carlos Guerrero: Ellos pensaban que si seguían en Laghonia no podí­an dar la cara en We All Together.
Antes de acabar la grabación del primer álbum, Carlos Salom decide dejar el grupo para seguir el rastro de una chica que se iba a vivir a Venezuela.

Félix Varvarande: Cuando estaban terminando de grabar el primer álbum le dije a Ernesto que le preguntara a Carlos si mi grupo, Illicit, podí­a hacer una audición en MAG. Fuimos aprobados, pero cuando empezábamos la grabación Ernesto me cuenta que Carlos Salom habí­a dejado We All Together y que quería que yo fuera su reemplazo. 'No puedes decirle no al grupo más importante del Perú', me dijo.

Carlos Guerrero: Después del sorprendente éxito de "Carry On", mi papá y yo fuimos a Ace Music Center, en Miami. Compramos un sintetizador ARP, amplificadores Ampeg para guitarra y bajo, además de una guitarra Martin, un bajo Rickenbacker y un Mellotron. El Mellotron nunca lo pudimos usar, nunca lo logramos entender, tenías que tocarlo teniendo en cuenta que después de 8 segundos dejaba de sonar. De todas formas, estas compras ayudaron a mejorar el sonido.

Félix Varvarande: No fue fácil adaptarme a la banda. Un día que no podía sacar la melodí­a de una canción, Manuel me botó del estudio. En la puerta me encontré con Saúl y le dije: 'Oye, Manuel me ha botado'. Él me habló con mucha calma y me explicó el temperamento explosivo de su hermano. Creo que si Saúl no me hubiera dicho eso, yo me habrí­a ido. Yo sentía que ellos estaban en otro nivel: los arreglos, las armonías vocales, las grabaciones de los instrumentos al revés, las conversaciones entre las voces, esas cosas no se hací­an en este paí­s. Para mí­ fue realmente abrumador.

Carlos Guerrero: La gente ya empezaba a pedirnos canciones en castellano. Entonces Saúl y Manuel componen "Lo más grande que existe en el amor". Una canción para la cual se hicieron varios montajes. Recuerdo que se grabaron como cuatro pianos, pianos que tocaban los bajos, pianos que tocaban los agudos. Ese disco salió en formato de 45, en junio de 1973.

"Lo más grande que existe en el amor", una de las mejores canciones del rock peruano, estaba inspirada en un segmento del primer concierto de Tchaikovsky. Fue un éxito total.

Félix Varvarande: Yo empecé a sentirme cómodo con We All Together con "Lo más grande que existe en el amor". Sentí que habíamos logrado algo muy propio.

Simultáneamente, se edita el segundo LP de la banda, conocido como "el disco del puente". A pesar de que el tiempo lo ha convertido en el disco de We All Together más aclamado por la crí­tica y de incluir solo temas propios, la placa no tuvo el éxito esperado.

Saúl Cornejo: Entonces apareció la idea de hacer un mini-LP con el cover de "Band On The Run", de Paul McCartney, para sacarlo antes de que la canción llegue a Lima. Es un criterio de venta conocido como "fusil": el que pega primero pega dos veces. Había un interés económico obvio. Félix y Ernesto votaron en contra del proyecto y no participaron en la grabación. Como yo trabajaba para MAG sentí­ que no podí­a votar en contra.

Carlos Guerrero: El mini-LP no funcionó. En ese momento ya creábamos anticuerpos en la radio. Iempsa tenía los derechos sobre los temas de McCartney y no querí­a que pasaran nuestra versión en lugar de la original. No iban a dejarnos usar sus temas otra vez.

Saúl Cornejo: Ese fue uno de los motivos de la separación de la banda.

Carlos Guerrero: Entonces yo decidí­ casarme e irme a Estados Unidos.

Félix Varvarande: El otro día, en medio de una actuación, logré que Saúl cantara conmigo el último tema del concierto, y lo presenté como mi maestro de composición. Lo cual no es falso, porque durante todo ese tiempo que yo trataba de componer canciones, Saúl me apoyó y me aconsejó mucho. Creo que en la banda no hay nadie tan afortunado como yo. Y es que yo era un admirador de ellos, un seguidor, en particular de Manuel y de Saúl, y terminé tocando con ellos. ¿Qué más podía pedir?

domingo, 27 de octubre de 2013

Retorno de Black Sugar (conversa con Carlos “Pacho” Mejía)



Con talento y personalidad peruana, Black Sugar mezcló la música negra estadounidense con el sabor de los ritmos latinos. Admirados en buena parte del mundo por su calidad, sus músicos ensayan en estos días un bienvenido retorno.

En pleno gobierno militar se les ocurrió hacer una versión en clave jazz rock latino del Himno Nacional. Los músicos integrantes del grupo Black Sugar subieron esa noche de 1975 al escenario de la recordada Feria Internacional del Pacífico algo temerosos dadas las circunstancias. Pero nada malo pasó, sino todo lo contrario.

"Pensábamos que los militares y la gente se iban a amargar, pero al final todos se pusieron a cantar", recuerda Carlos "Pacho" Mejía, vocalista principal de una agrupación que con el paso de los años, y pese a su disolución, fue ganando prestigio dada la calidad de sus grabaciones, al punto de ser actualmente considerada pionera latinoamericana del funk y de la fusión de rock y elementos latinos.

Hoy, Black Sugar ha vuelto a los escenarios. El sábado participaron de un concierto en un local miraflorino, en el cual la privilegiada garganta de Mejía fue acompañada por varios de los grupos con los que a lo largo de los años ha cantado. Pero sus planes van más allá de ello, nos dice.

"Nuestra idea es hacer cosas nuevas, tratando de que el grupo suene contemporáneo", señala el vocalista, quien afirma estar componiendo material inédito con el tecladista Miguel "Chino" Figueroa. Este, junto al guitarrista Víctor "Coco" Salazar, y el baterista José "Arrocito" Cruz, fueron parte de la primera época de una agrupación que durante cerca de una década gozó de popularidad y prestigio a partes iguales en la escena peruana.

"Cuando sacamos nuestro primer disco, muchísimas personas pensaron que se trataba de músicos portorriqueños o panameños por el swing que teníamos", recuerda Mejía.

La confusión permanece hasta ahora y puede leerse en los comentarios a los videos que sus admiradores han hecho utilizando canciones suyas para colocarlas en el portal Youtube. Felizmente son y siguen siendo peruanos.

Quien escuche cantar a Mejía en los discos de Black Sugar notará en él la expresividad de esos cantantes negros estadounidenses que, partiendo del rhythm & blues, buscaron un perfil propio en estilos afines a este género y cercanos al rock. De hecho, cualquiera pensaría encontrar a un afroperuano empuñando el micrófono, pero eso no es así.

Fue justamente su interés por el repertorio de grupo de rhythm & blues de los años 60 el que hizo destacar a Mejía, cuando aún estaba en Dr. Wheat, banda formada en el barrio de Jesús María, y en la que entre otros estaba Eduardo "Mono" Chaparro, quien luego fundaría Sargento Pimienta, uno de los reductos más longevos del rock peruano.

"Era 1968 y hacíamos música de Otis Redding y The Temptations", refiere "Pacho". Su interpretación de uno de los éxitos de la segunda banda mencionada ("Get Ready") llamó la atención de "Coco" Salazar, quien le pidió integrarse a Los Far Fen, grupo que vinculaba rock con percusión latina e instrumentos de viento.

Poco tiempo después, con el cambio de varios de sus integrantes, y con la firma de un contrato con la disquera Sono Radio, la banda cambió de nombre,aceptando una idea del destacado músico Jaime Delgado Aparicio (director artístico del referido sello), quien terminaría produciendo sus grabaciones.

"En ese tiempo solo se conocía la azúcar rubia, así que él planteó referirnos a otra de color negro", dice Mejía. "Incluso hubo una campaña publicitaria previa a la salida del disco en la que se decía 'Ya viene la azúcar negra'", dice.

El interés que le brindaba Delgado Aparicio a Black Sugar supuso grandes privilegios. "Teníamos reservado el estudio de grabación durante toda la noche", recuerda "Pacho". "Empezábamos a las 8 de la noche y terminábamos a las 4 de la mañana."

Esto permitió que el grupo desplegara todo su talento componiendo y haciendo arreglos. "Tanto 'Coco' como 'Chino' no pasaban de los 25 años y eran músicos 'de oído', pero tenían una gran capacidad creativa", dice Mejía. 

Si bien el toque final lo daba el productor, es innegable la habilidad desplegada por estos artistas en las siete composiciones propias que forman parte de su primera producción, titulada con el nombre de la banda y presentada en 1970.

Temas como "Too late" y "Viajecito" –con los que el disco comienza– mezclan con sorprendente naturalidad guitarras roqueras, vientos cercanos al jazz y acordes de piano de índole tropical. Esto último es lo que distingue a Black Sugar de bandas anglosajonas contemporáneas suyas, como Blood, Sweat & Tears o Tower of Power, porlas que estaban influenciadas en lo que respecta a arreglos de viento y estilo vocal.

"En esa época entraba con mucha fuerza aquí lo que luego se conoció como 'salsa dura'", explica Mejía, que también enlista a los neoyorquinos Eddie Palmieri, Joe Cuba y Ray Barreto como fuentes de inspiración para la música de su grupo. 

Cuando esta fue tomando mayor fuerza, "Pacho" –por encima de todo, un amante del rock–, tuvo una conversación con Salazar (arreglista principal de la banda) respecto a lo que sentía como la "salsificación" de Black Sugar. 

"Concluimos que en ese momento los salseros hacían cosas más elaboradas y finas; con arreglos buenos y complicados. Ya no solo era cantar '¡qué viva Changó!'...".

El disco –que también incluye temas netamente funk de Roberto Valdez y la batería de "Arrocito"– alcanzó un gran éxito, que se manifestó en innumerables presentaciones, pactadas para cada fin de semana. Incluso empezaron a llegar ofertas del exterior, truncadas absurdamente.

"Cuando querían contratarnos desde Estados Unidos la disquera pedía montos excesivos y por eso nunca se concretó nada", dice Mejía. "Eso se debía al contrato que firmamos con ellos. Nos manejaban y aparentemente querían recuperar en un solo mes la inversión que hicieron en nosotros..."

Pasaron cuatro años hasta que Black Sugar volvió a editar nuevo material. El retraso en la elaboración de II derivó de la espera de que concluyan las mejoras en el estudio de grabación de Sono Radio, ya de por sí uno de los mejores del país.

"Vinieron técnicos de Estados Unidos para instalar una consola de 36 canales y un equipo de grabación cuadrafónico. Lamentablemente nos usaron de conejillos de indias porque fuimos los primeros en grabar allí. Eso hizo que no se le pudiese sacar el máximo provecho al nuevo equipo".

Mientras, el grupo había crecido, con la inclusión del trombonista Luis Calixto y el saxofonista Pedro Gosicha, que se aunaron a la trompeta de Antonio Ginocchio y al saxo de Jorge Chávez. De allí que haya más arreglos de viento. En "Wake Up", por ejemplo, se acercan al sonido de los norteamericanos Chicago, y en "The Dawn of my Madness" van por la ruta de Tower of Power. Figueroa, además, experimenta con el sintetizador Moog en "Kathy". 

La salsa, finalmente, se hacía presente de manera integral con "Fuego", cuyo coro está inspirado en un tema de Ray Barreto. "Pero a pesar de que podría haber más creatividad porque hay también más instrumentos, la calidad del sonido no fue tan buena como la del primer disco", acota "Pacho". Pese a ello, la banda continuó su imparable racha de presentaciones en diversos puntos del país, con singular éxito. 

De esa época es la anécdota derivada de una fiesta posterior a una presentación en Trujillo, junto a Perú Negro, que generó las quejas de los huéspedes del hotel y la posterior expulsión –a las cuatro de la mañana– de los músicos y de los miembros de la referida compañía de baile (para quienes ya antes, en el primer disco, habían hecho una versión con sabor afroperuano del tema "Pussycat", original de Blood, Sweat and Tears, con notoria participación de los percusionistas Coco Lagos y Miguel Salazar). 

Un concierto conjunto en el coliseo Amauta con los españoles Barrabás marcaría otro punto alto  en la carrera del grupo en dicha etapa. Sin embargo, la vida tenía que continuar y para 1976, "Pacho" Mejía decidió irse. 

"Es que en las fiestas y conciertos pedían mucha música como la que los Bee Gees empezaron a hacer entonces y eso no iba conmigo". A ello se aunó haber culminado sus estudios de publicidad. "Entré a una agencia publicitaria y me alejé de la música."
Black Sugar volvió a reunirse en 1985, de manera efímera, y luego en 2011, en lo que aún está tomando la forma de un retorno que se consolidará como definitivo cuando sus primeros frutos empiecen a aparecer.

viernes, 25 de octubre de 2013

We All Together - ¡Grata Sorpresa!



Hace 37 años We All Together (WAT) lanzó su primera producción y en Junio último han presentado su nuevo material. Se llama “Surprise”. En esta ocasión la banda está conformada por los hermanos Saúl y Manuel Cornejo junto con Carlos Guerrero en la voz principal.

Podemos resumir que es una producción de alta calidad. Además de ser un disco imperdible para los fans de la banda peruana, en esta producción se nota la mano de la tecnología, pero conservando ese sabor de los 60s y 70s que tanto gustaron. No en vano pasan los años, la sabiduría crece y en este caso el arte no es la excepción, el diamante está más pulido que nunca, y se puede escuchar en cada una de las canciones que We All Together nos presenta.

Habíamos tenido la oportunidad de escuchar el tema “Blue” en youtube con unas emotivas imágenes que muestran a We All together en plena grabación. Y realmente notamos que la calidad de esta producción sería sobresaliente.

Los Temas:

“Blue” es una canción bien lograda, sobria pero melódica, con interesantes arreglos en la guitarra acústica. Son de ese tipo de canciones que puedes escuchar mil veces y nunca te vas a aburrir.

“Sara” es más adulto contemporánea, juega con las disonantes en los acordes además de incluir hermosos arreglos vocales al estilo de los Wings.

“Etéreo y Oscuro” empieza lento, quizá algo poco prometedor pero poco a poco intervienen algunas sorpresas, como las cítaras, y otros instrumentos empiezan a integrarse a un softrock que pretende jugar con solo unos cuantos acordes, pero con un sinnúmero de arreglos en su trayectoria.

“Surprise” es una balada pop sencilla, pero interesante por la armonía de su estructura, los arreglos del piano no distan mucho del brit pop moderno, podría parecerse por un instante a un espectro de Coldplay, Travis o Keane conjugado con los arreglos vocales característicos de WAT.

“Lonely Star” es una baladita Blues muy ligera, pero con mucha erudición en su ejecución, sobre todo en los arreglos de la primera guitarra, altamente recomendable para los jóvenes que tocan este instrumento, a mi me parece muy inspirador.El saxofón que se presenta era justo y necesario, le da poder al tema y el solo de este instrumento está bien logrado.

“Eres” es un pop tradicional que nos hace recordar al WAT de fines de los 80s.

“I Wanna Believe” es una balada soft interesante por que la secuencia de notas es beatlesca, pero conjugada con arreglos modernos, aún porque le adicionan una guitarra con slide que hace recordar los arreglos de George Harrison, el coro en “feeling, loving, running, wasting my time” la hace memorizable, podría ser un buen single este tema.

“You ain’t coming back” es una especie de bolerito blues, muy bien presentado, sobre todo por los coros y los arreglos en guitarra acústica. Este tema es compuesto por Carlos Guerrero luego de la muerte de Ernesto Samamé.

“Relax” es un tema beatlesco por naturaleza, los arreglos del piano, los coros y la guitarra nos hacen recordar “Getting Better” a esto se suman unas discretas palmas y el B3 que suena adornando el fondo, todo ello como invitando a corearla vez tras vez.

“Solo tu” Es una balada etérea como yo le digo, ya que suena algo parecido a Alan Parsons. Por el timbre de voz se reconoce que es Saúl Cornejo quien canta el tema.

Como ven este coleccionable es muy valioso e interesante porque enriquece más nuestra discoteca sobre todo a los que gustan de la música de We All Together. El disco además tiene un booklet con la letra de las canciones, fotos de la banda en la grabación y el trabajo artístico de Manuel Cornejo. Este disco está dedicado a la memoria de Ernesto Samamé, bajista original de la banda quien falleció en marzo de 2006. La contracarátula del booklet es una foto muy emotiva, Saúl, Manuel y Carlos frente a un atardecer en el mar, recreando la foto en donde la banda aparece en la misma posición en su segundo álbum de 1974. "Surprise" ha sido producido por los tres integrantes y está bajo el sello So-Ho Records.

Publicado el 25 de octubre del 2009 en el blog Colectomanía

miércoles, 23 de octubre de 2013

PAX (Peru) - 1970 - "PAX"



Tracklist:

1. A Storyless Junkie 5-35 (Aguirre, Aguilar)

2. Rock And Ball 4-38 (Aguilar)

3. Green Paper (Toilet) 4-06 (Flores, Aguirre)

4. Sitting On My Head 4-41(Aguirre, Aguilar)

5. Deep Death 5-37 (Aguirre, Flores)

6. For Cecilia 4-59 (Aguilar)

7. Pig Pen Boogie 4-27 (Aguirre, Aguilar)

8. Shake Your Ass 1-10 (Aguilar)

Line-up:

Mark Aguilar - lead vocals, bass guitar, piano

Ego Aguirre - lead, rhythm & acoustic guitars,

              organ, backing vocals

Miguel Flores - drums & percussion, backing vocals

Jaime Moreno - lead & backing vocals

String arrangements by Enrique Lynch.

Produced by Pax.

Recorded by Manuel Bellido

at "Radio Studio 1", Lima, Peru.

Prologue. According to the CD booklet notes, Pax's only self-titled album was originally released on the Peruvian "MAG" label in the middle of 1970.

The Album. First of all I'd like to say you that Mark Aguilar (who is Peruvian) more than thirty years ago sung in English better that a lot of contemporary non-English language vocalists, while his voice reminds me Dan McCafferty's of Nazareth. Secondly, it is more than hard to believe it, but Pax's only self-titled album, composed and performed in the first half of 1970, musically can't be compared to any of the bands that, at the time, were also performing Progressive Hard Rock (Black Sabbath, Led Zeppelin, Deep Purple, Uriah Heep, Clear Blue Sky, etc). And you may not believe me (until you check Pax's CD out and listen to it), but musically, structurally, stylistically (by all means!), the "Pax" album sounds like a forerunner (the older first cousin from South America?) of both the most commercially successful (not only, though) albums of Nazareth ("Rampant", 1974) and Sweet ("Fanny Adams", 1974). Especially interesting is that the debut albums of both of these UK bands were released in 1971! Also, as well as in the case(s) of "Rampant" and "Fanny Adams" albums, about half of the songs of "Pax" sound squarely in the vein of traditional Hard Rock of the 1970 (i.e. with heavy, strong, quite diverse and, vigorously, very power riffs with a few of guitar solos between vocal parts), and another half of them are, compositionally, fully corresponding to the term of Progressive Hard Rock (where there are a lot of changes of vocal and instrumental themes, tempos, and rich instrumental arrangements as well). These are songs from the "Pax" album that have all the essential compositional ingredients so as to be named the works of a true Progressive Hard Rock: A Storyless Junkie, Sitting On My Head, Deep Death, For Cecilia, and Pig Pen Boogie (tracks 1, 4, 5, 6, & 7 respectively). Personally, I am especially impressed with Deep Death, Sitting On My Head, and For Cecilia, going one after another. The first of them contains, apart from others, a couple of quite long and, what's the main, extremely unique (I have never heard anything like this before) dark episodes with slow yet very tense guitar riffs and gloomy mid-tempo organ solos. Sitting On My Head is, in my view, the most diverse composition on the album. In each of the said five songs there are also original and virtuosic (just wonderful) interplay either between two soloing guitars and bass or between guitar, bass, and piano solos, going to the accompaniment of the (always) excellent and diverse drumming. The first part of the song For Cecilia (track 6) is one of the most wonderful Proto-Prog ballads I have ever heard. Performed without bass guitar and drums, but still remaining lush and tastefully orchestrated, it is full of sincere beauty (especially the vocal sounds). Of course, I was sure that For Cecilia is a (charming) ballad from the beginning to end (all we are more than used to hearing on albums of Hard Rock or Hard 'n' Heavy such ballads that sound mellow as a whole, aren't we?). So I was really amazed when in the middle of the song I heard the wall of heavy sound with the excellent fast guitar solo on quite a slow, doom-y background instead of the continuation of the mellowness. Green Paper (track 3) is also quite rich in interesting arrangements, and although there are also a few of changes of themes and tempos in this song, it has mixed (electric and acoustic) structures as a basis. Another track with a mixed stylistics is Rock 'n' Ball (track 2). In full accordance with the title, there are all refrains sound on the background of Rock 'n' Roll, while the main themes and instrumental parts are based on heavy riffs. Each of Green Paper and Rock 'n' Ball contains also a couple of the fast, incredibly tasteful guitar solos. Finally, Shake Your Ass is just a short humorous song with a loud laughter in the end.

Summary. Wow! Well, once Mr. Columbus has discovered the American continent. Is it now really my turn to explore the (hidden, at least very obscure) roots of South-American Progressive Rock movement (and I have five CDs more on this point)? Then I have to admit that there was practically the same situation with Rock music at the Dawn of its (international) movement on that so distant and exotic mainland. Back to the hero of this review, if the albums of the five 'heavy' UK bands, that I mention above, really surpass the Peruvian Pax only album released the same year of 1970, then "Pax", IMHO, easily surpasses any of the early Grand Funk (1969 - 1972) and Nazareth albums (1972 - 1973, maybe with the exception of their debut self-titled album of 1971), as well as both the debut albums of the same Sweet (1971) and Wishbone Ash (1970). So, "Pax" is highly recommended to all those into an old 'n' gold Progressive Hard Rock (too, as I myself), at least.

VM. October 26, 2001


PAX (segunda etapa)

Texto de Jorge Mora, cantante y bajista de Pax desde fines de 1984 hasta 1987, en que se disuelve el grupo por segunda vez al frustrarse la salida de su segundo LP.



Hacia fines de 1984 tenia un grupo de rock tonero que tocaba en fiestas particulares, se llamaba Sociedad Anónima y se formó casi como jugando. Tengo un primo que por esa época tenia equipos en su casa comprados por mi tio que en algun momento quiso formar una orquesta o algo asi. Así que empezamos a ensayar y él nos consiguió contactos para fiestas. Parece que en alguna de ellas me vio Juan Carlos Caipo, tecladista de Pax y le paso la voz a Pico Egoaguirre porque justamente el bajista y cantante que era primo de Juan Carlos se iba a USA a vivir. Fue así que entré en su reemplazo justamente como bajista y cantante. Esto me animó mucho porque mis raices vienen de Led Zeppelin y Jimi Hendrix y lo que hacia con sociedad Anónima era divertido pero no llenaban mis espectativas como músico, por dentro el rock y el blues que llevo en el alma pugnaban por salir. Pax era un grupo al que yo admiraba mucho cuando estaba en el colegio y me parecia increible que Pico Ego Aguirre, el alma matter del grupo, me estuviera llamando para hacer una prueba con ellos. Es curioso porque anteriormente, 1980, ya había sido solicitado por Octavio Castillo para cantar en Frágil cuando Andrés Dulude se fué a Mexico a cantar para una orquesta peruana, pero esa es otra historia que ya contaré en otro momento.
Exterminio era una de las canciones que ya existia en el grupo pero lo único claro que yo escuchaba era el coro porque las estrofas eran una serie de palabras que rimaban pero que parecian no tener ninguna coherencia, por lo menos para mi. Así fue que en base a la melodia y al coro arme la letra de la canción buscando algo que transmitiera mis inquietudes acerca de la vida, la sociedad y el maltrato al planeta. Hicimos los arreglos y la grabamos en un 45 teniendo en el lado B nuestra versión en castellano de Radar Love que llamamos Radar de Amor. Se escuchaba rock fuerte en la radio en ese tiempo y la canción pareció gustarle mucho a Mauricio Alcantara que la propuso para la programación de Radio Panamericana que esa época transmitian pop y rock. La canción tuvo gran exito a nivel nacional e hicimos muchas giras los años 85, 86 y parte del 87 por casi todo el Perú. Anteriormente ya Pax habia tenido varios éxitos dado que es un grupo que se formó en 1970. Por el año 74 y 75 Gerardo Manuel reemplazo al cantante y grabaron Radar Love antes de que el grupo original, que se llamaba Golden Earring, se dejara escuchar por estos lares. El tema tuvo un éxito cerrado en los circuitos de rock e incluso hasta ahora hay gente que piensa que la canción es de Pax. Cuando entre al grupo hicimos otra vez este tema pero lo arreglé en español, que yo sepa es la única versión que existe en nuestro idioma. Esta canción junto con Exterminio le interesaron a un productor y nos propuso grabar un LP. Tomamos algunos temas del primer Pax arreglandolos en español y otras nuevas composiciones (Ficciones, Vampiros en la noche)y empezamos a grabar lo que sería el nuevo Pax en la disquera Sono Radio. Luego que terminamos de grabar la disquera quebró y fue embargada en su totalidad incluyendo maquinas y cintas. Ahi se quedo el nuevo disco de Pax que nunca pudo salir a la venta. Luego parece que esa cinta la regrabaron perdiendose horas de grabación y amanecidas. Esta situación deprimió mucho al grupo y terminamos separándonos alrededor del 87. Fue una verdadera lástima. A partir de alli cada uno siguió su camino hasta la actualidad que hemos decidido retomar y terminar bien aquella etapa inconclusa. Parece que va a haber Pax para rato a partir de ahora.

La foto corresponde a la reunión PAX-Abuelos de la Nada en 1985. De izquierda a derecha: Nicolas Mantani, Jorge Mora, Miguel Abuelo, Polo Corbela (batería), Pico Ego Aguirre y Juan Carlos Caipo. La foto y el texto aparecen en el blog de Jorge Mora RockRojo

miércoles, 16 de octubre de 2013

Andrés Roque Palma: "El Quinto Belking"

Flotando entre las imágenes de Google aparece un antiguo recorte de algún diario peruano, sin fecha ni nombre del medio. La reseña es sobre Andrés Roque Palma, conocido como "el quinto Belking", compositor de grandes temas ("Bólido de fuego", "Ilusiónate chica", "Funerales", etc.) y amigo de los integrantes del grupo. Procedo a transcribir la nota.





La primera vez que Los Belkings le pidieron unos temas suyos para grabarlos, André Roque Palma, alumno del colegio Cristobal Colón en Lince, no pudo evitar sentir desconfianza, profundo temor a ser defraudado.
“Pensé en tantos compositores que son engañados y cuyas composiciones son firmadas después por los usurpadores”. “Por eso dije que no”.
Felizmente para Andrés Roque, Los Belkings insistieron en pedirle sus composiciones. Willy Sandoval tuvo que prometer bajo palabra de honor a Andrés que de llegar a hacerse la grabación aparecería su firma en los discos.
Andrés Roque, quien ha finalizado la secundaria el año pasado, ha ganado ya más de 20 mil soles con sus temas grabados solo por Los Belkings. Y espera ganar una cantidad casi igual con sus regalías de “Amor Imposible”.
Los temas que le han proporcionado esto que cualquier muchacho de secundaria consideraría una fortuna, son: “Bólido de fuego”, “Ilusiónate chica”, “Esmeralda” y “Jamás lloraré”, tema este último del tercer LP grabado por Los Belkings.

A los 14 años

Andrés empezó a componer a los 14 años. Tiene en la actualidad unos 70 temas inéditos que también serán para Los Belkings, según declara.
En su barrio de Francisco de Zela 2065 es un muchacho muy popular. También se le conoce como “suplente de Los Belkings”, porque el año pasado reemplazó por algunas semanas a Willy Sandoval.

Compuso antes de tocar

Andrés cuenta que compuso sus primeras melodías antes de aprender a pulsar la guitarra eléctrica, instrumento que ahora domina.
“Las compuse tarareando. Al principio me costaba mucho trabajo memorizar los tonos, después papá me enseño a escribirlos rudimentariamente”, revela.
Andrés Roque Palma está seguro de que pronto triunfará internacionalmente. “Será junto a Los Belkings que parece que viajarán pronto a Panamá y México”, anunció.
Los Belkings por su parte han demostrado en cuanta ocasión ha sido posible su devoción a Andrés como compositor. Andrés y ellos forman un sólido grupo de amigos y quieren continuar así por mucho tiempo.


lunes, 14 de octubre de 2013

Los Shain's



Los Shain's es una banda de garage rock, rock and roll y rock psicodélico peruano formada a fines de 1963. Fue una de las bandas más importantes de la época dorada del rock peruano en los 60s. Grabaron 4 discos de estudio e hicieron la banda sonora de la película mexicana Las Psicodélicas. Durante su duración pasaron muchos integrantes, sin embargo habrían dos estables y fundamentales en la historia del grupo y que luego de la separacion del grupo seguirían aportando para la historia del rock peruano: el vocalista Gerardo Manuel y el guitarrista Pico Ego-Aguirre. La banda original decidió reunirse a mediados del 2005 para realizar una serie de conciertos.

Inicios y formación

La historia de la banda comienza en 1963, los hermanos Juan Luis y Raúl Pereyra junto a David Delucci Pereyra empezaban sus ensayos inspirados inicialmente en The Beatles y The Shadows. Para fines de ese año conocen a Pico Ego-Aguirre, quien provenía de una familia muy musical. Completaron al grupo con Quique Rossell en batería y Nito Muente Saco-Vértiz en voz. Luego el padre de Pico, Enrique Ego-Aguirre, se convirtió en su manager y les consiguió presentaciones en programas como Lo mejor de la semana y en Clan del cuatro. Luego Quique Rossell y Nito Muente Saco-Vértiz, serian reemplazados por José Clark y Miguel Arista en voz. Luego graban su primer disco de 45 R.P.M. para el sello Iempsa que contenia los temas "Tomahawk", composición instrumental de Juan Luis y el tema "Pretty girls everywhere" de Eddie Cochran, luego los hermanos Pereyra dejaron la banda y Juan Luis Pereyra formaría Los Drag's.

Éxito y popularidad

Para fines de 1965 la banda recién tomaría personalidad con la incorporación de Gerardo Manuel, quien junto a Pico Ego-Aguirre ya tenían planeado explorar mas con el surf rock y el garage rock, lo que ayudaría a obtener un eje para el grupo y para la movida rockera de la época. Empezaron a influenciarse rápidamente por grupo de garage rock como The Trashmen, The Ventures, Dave Clark Five, The Zombies, entre otros. Para la grabación de su primer LP, el grupo obtuvo instrumentos de última generación como Fender Mustang, Fender Stratocaster, batería Ludwig y sistema Eco de cinta. En su primer LP grabaron covers adaptadas al español por Gerardo Manuel y 2 temas propios "Shain’s a go go" y "Hoy". La alineación de este primer disco titulada El ritmo de Los Shain’s fue con Pico en guitarra principal, Hernán Chocano en segunda guitarra, Gerardo Rojas en voz, Alexei Kostriski Pereyra en bajo, Lynn Stricklin en el órgano Farfisa, Pedro Pajuelo (que grabó un par de temas) y luego entraría en su lugar Julio Chávez Cabello para grabar la batería de los demás temas. Para 1966, en la escena local Los Saicos ya se habían separado y el grupo se convertía en una de las principales del momento, el grupo se presentaba en programas como El Hit de la una, Cancionísima y Bingo en Domingos Gigantes. Uno de los memorables momentos de la banda es el mano a mano que tuvieron con el grupo uruguayo Los Shakers en el Cine Excelsior. El grupo que pasaba por su mejor momento de popularidad graban su segundo LP titulado Volumen Dos, se retira Julio Chávez Cabello e ingresa solo por un corto tiempo Bimbo Macedo en batería, Jorge Pomar que luego sería reemplazado por Juan Carlos Barreda en bajo y se re-incorpora Carlos Manuel Barreda en la batería y Beto Tataje en segunda guitarra, la grabación de este disco fue entre fines de 1966 e inicios de 1967 donde le grupo cambia de estilo por el rock psicodélico y hippie. Para 1968 la banda graba su tercer LP titulado Docena Tres, donde el grupo se inspira en sonidos hindú así como también de los Beatles y Rolling Stones, además el grupo empezó con más frecuencia las distorsiones en guitarra, algo muy poco usual en esa época en los estudios de Iempsa pero que ya se hacía en el grupo desde antes del segundo LP. Paralelamente la productora mexicana de cine Churubusco los contrató para que sean la banda sonora de la película Las Psicodélicas dirigida por Gilberto Martinez Solares donde participa también Rogelio Guerra y que sería filmada en Lima. Luego de este rodaje viajan a Mexico a promocionar el filme, a su regreso por contrato tuvieron que grabar un cuarto disco titulado Instrumental, donde Gerardo Manuel toca el saxo y en la portada no aparecen los integrantes del grupo. Luego de esto, a fines de 1968, Gerardo Manuel, los hermanos Barreda y Tataje dejan la banda y Pico buscaría nuevos integrantes para formar Los Nuevos Shain's, mientras por su lado Gerardo Manuel formaría The (St. Thomas) Pepper Smelter.

Discografía

Discos de estudio

- El ritmo de Los Shain’s (Iempsa 1966)
- Segundo Volumen (Iempsa 1967)
- Docena Tres (Iempsa 1968)
- Instrumental (Iempsa 1968)

Recopilatorio

- Singles 1966-1968 (Repsychled Records 2005)

Colaboraciones en otros discos

- Pepe Cipolla (Odeón/Iempsa 1966)
- Misa a Go-Go (compilado, con los temas “Aleluya” y “Caminos”, Iempsa 1967)

Publicado en Wikipedia

domingo, 13 de octubre de 2013

Traffic Sound en clave de Magnet



Jean Pierre Magnet es conocido por todos los peruanos por ser un gran músico, saxofonista, y por haber tocado junto a figuras renombradas como Eva Ayllón. Sin embargo, no todos conocen que este músico inició su carrera en el grupo de rock llamado “Traffic Sound”, una banda que pertenece a una de las primeras épocas de este género en nuestro país y que cualquier melómano consideraría fundamental. Tanto así que uno de sus temas, Meshkalina, sigue en el imaginario de varios.

—¿Cómo y cuándo fue la primera grabación de Traffic Sound?
—Jean Pierre Magnet: En 1967, el señor Guerrero (Sello MAG) nos ofreció el estudio, íbamos todos los días a grabar. 

—¿Cómo era la escena rockera en la época de los sesenta y setenta?
—Casi todo estaba en las matinales.

—¿Sólo matinales?
—Seguro pasaban en la radio, había un par de radios, no recuerdo cuáles, solo una que se llamaba Atalaya.

—Algo que le interesa mucho a las personas que escuchan su música son las influencias de Traffic Sound, ¿cuáles eran?
—La influencia era Rolling Stones, Led Zeppelin, escuchábamos todos esos grupos que había.

—Pero Led Zeppelin es de 1969.
—Ustedes son los que saben de fechas, ya ni me acuerdo. También estaban los Beatles.

—¿Y cuáles eran las influencias para usted personalmente, para el caso de los vientos?
—Había un grupo que se llamaba Traffic.

—¿Traffic? ¿De ahí viene el nombre Traffic Sound?
—No, nosotros de pura coincidencia nos encontrábamos cuando ensayábamos con un semáforo de juguete, que era grande. Y lo llevábamos a los tonos y ahí lo poníamos. De ahí salió Traffic Sound. Después nos enteramos que había un grupo que se llamaba Traffic, muy bueno, inglés, con Steve Windwood. Ahí nos volvimos fanáticos.

—¿Cómo eran las presentaciones de Traffic Sound en sus inicios?
—Tres horas de Rock. Tocábamos canciones para las fiestas: Rolling Stones, The Doors, mucho The Doors, Los Kinks. Nosotros tocábamos y aprovechábamos para tocar como tres de nosotros: “Chicama Way”, “Siento”, “Meshkalina”, esas eran más o menos.

—Hay canciones de Traffic Sound que expresan cosas polémicas para la coyuntura de ese momento como “To hell with your revolution”…
—El que ponía las letras era Manuel (Sanguinetti). Se puede pensar que era la expresión del grupo, pero las letras eran cuestión de él. 

—¿Pero los demás no intervenían en el proceso de la composición de las letras?
—No, decíamos que como él las iba a cantar, que las haga él pues. La música sí la hacíamos todos, o sea cada uno hacía su rubro. Yo ponía los solos y la parte de improvisación. A raíz de Traffic Sound me puse a estudiar, porque siempre tuve la vena creativa y siempre quise componer mi música, pero en esa época no sabía cómo, no sabía armonizar, no sabía cómo tocar una guitarra, un acorde, nada. Por eso me puse a estudiar música.

—¿Qué pasó al final de Traffic Sound? ¿Por qué se separaron?
—Porque todo en la vida tiene un ciclo. Todos los grupos, parejas, relaciones humanas tienen un ciclo. Por ese motivo nos separamos.

—En otras cosas, qué puede decir sobre el primer disco de Traffic Sound “Bailar a Go-Go”, en el que salía una chica en la portada.
—Esas eran las fotos que tomaba Manuel Guerrero, en Ancón. “Bailar a Go-Go”, nada que ver pues, ¿qué tiene que ver bailar a go-go con un grupo de rock psicodélico? (risas) ¿qué íbamos a hacer? A nosotros más nos interesaba grabar y crear, en la balanza decíamos “no importa” , porque grabábamos en el estudio.

—¿Para usted que significa Traffic Sound?
—Para mí, importantísimo. Marcó mi camino de vida musical y en muchos sentidos, en el sentido de energía compartida con un grupo de amigos, en el sentido de haber vivido una sociedad musical, ahí no aprendí, sino empecé psicológicamente a relacionarme con mis compañeros músicos. Psicológicamente porque es todo un tema cómo tratar a tus socios, tus amigos, y más aún en la música. Viví la experiencia de lo que es tener un grupo, que quiere decir democracia, todos iguales. Aprendí a respetar las opiniones de los demás, a ver dentro de mí una fuerte corriente creativa, gracias a Traffic Sound, que después fue la semilla que marcó mi vida musicalmente hablando. Y mira, aún sigo en la música.

—¿Qué le diría a esas personas que creen que esa generación, la suya, es la mejor en cuanto a rock peruano?
—Bien por ellos si creen que es la mejor, porque cada uno se identifica con lo que más le gusta. Si para ellos eso es lo que más le gusta, chévere. Yo no entiendo por qué es la mejor porque quizás el mundo de esta persona, que debe tener ahora como 60 años, en esa época, su mundo era la música, como lo es ahora una persona entre 16 y 21 años. Es parte de ese mundo, de esa edad.

—Traffic Sound ha tenido algunas reuniones en los noventa y la década pasada. ¿Por qué no de nuevo?
—Bueno, porque hay temores entre los integrantes a aparecer, qué se yo. Soy el único músico que sigue activo, no tendría ningún problema, pero los demás que no ejercen la música tienen sus temores, que tengo que respetar. 


sábado, 12 de octubre de 2013

Los Belkings, banda pionera



Una caja de whiskys los inspiró. A la marca de licor pituco Belkin, los muchachos del colegio Melitón Carvajal le hicieron profilaxis. Le sumaron la "g", el apóstrofo y la "s", letras y signo ortográficos de rigor que implementaban los conjuntos que en la década de 1960 querían dedicarse a roquear. 

Como Los Beatles y otros congéneres, Los Belking's, aquí en Lima la gris, se iniciaron en aquel 1964 con trajes de sastre, tres años después grabaron su primer disco y cuando la sicodelia se volvió carne y grito de moda, aparecían en escena con camisas floreadas. Siguieron en carrera hasta 1973, cuando debieron hacer un paréntesis por largos años, un poco promovido por la desaparición de las famosas "matinés" en cines o teatros de barrio durante esos años.

Lo fuerte de Los Belking's no era el verbo sino lo instrumental, y por ese silencio algunos los creían extranjeros. "Hacíamos cosas muy difíciles para ese momento como Strawberry Fields Forever, de The Beatles, en instrumental, o versionando a The Ventures". Los que sí hablan son sus éxitos por sí mismos como "Bólido de fuego", "Sétima patrulla", "Campo de concentración" u "Okinawa 2000". El disco 45 RPM donde incluían su versión de "Tema para jóvenes enamorados", los levantó en hombros: vendieron en solo cuestión de semanas más de 25 mil copias.

"Siempre nuestro esquema fue distinto y ahora también es radicalmente diferente. Nunca nos quedamos estáticos, somos inquietos (musicalmente hablando)", cuenta Willy Sandoval, segunda guitarra y uno de los fundadores de Los Belking's. Así, un proyecto que tienen es la edición del nuevo CD, que trabajan desde hace un quinquenio, pero que se ha estancado por falta de dinero. Ahí estará el nuevo sonido de Los Belking's, revitalizando sus éxitos hasta hacerlos casi irreconocibles. "La música de nosotros tiene hoy otras características gracias a que la tecnología nos ha permitido ponerle nuevos sonidos", explican.

El rasgueo de la guitarra de doce cuerdas Teisco de Sandoval es parte del sonido. Mientras que Raúl Herrera, el otro puntal del grupo desde sus inicios, otorga, desde la primera guitarra, el DNI de Los Belking's. Ahora a Herrera y Sandoval los secundan Juan Mostacero (batería); Juan Carlos "El Oso" Barreda, quien retornó después de años a su trabajo en el bajo; y el joven Luiggi Lindley, la otra primera guitarra del grupo. La meta artística del año es dar la mayor cantidad posible de conciertos masivos, sobre todo en los conos de Lima y en provincias.

En 2003 el grupo retorno cual ave fénix a los escenarios cuando en España se editó Los Belking's Instrumental Waves 1966-1973 (2003), álbum que, dicen, vendió un millón de copias en Asia y Europa, pero del cual no han podido cobrar ni un céntimo. La razón se debe a que recién en diciembre, tras varios años en juicio, el Indecopi sacó una resolución reconociendo a Herrera y Sandoval como dueños del nombre Los Belking’s. Esto se debió a que en el norte del país un grupo de música tropical se había apoderado del nombre tan ligado a nuestra historia del rock.

Los Belking's tienen otros temas que discuten fuera de los escenarios: las regalías que Apdayc debe entregarles, por ejemplo. Calculan que hay alrededor de dos millones de dólares por los siete millones de discos que han vendido en toda su historia musical y por ello tampoco han recibido dinero ni como compositores ni como intérpretes.

Un tema ligado al anterior: Los Belking's han desautorizado a la distribuidora Iempsa para que siga vendiendo sus producciones anteriores (originalmente grabadas para el desaparecido sello El Virrey) hasta que no les paguen todo el dinero que les adeudan.

En 1967 con "El Guazón" y "La playa" inician su carrera en las salas de grabación. En su momento, llegan a vender más discos que el grupo de nueva ola Los Doltons. Críticas sobre su trabajo han aparecido en revistas especializadas en el viejo saurio del rock como Senhor (Brasil), Mojo (Inglaterra) y Les Inrock (Francia). Su estilo ha asimilado psicodelia, rhythm & blues, hard rock y latin rock; e incluyen composiciones de Herrera, Sandoval, Andrés Roque y Daniel "Kiri" Escobar.

Traffic Sound



Si es que existe algún grupo que hay que escuchar obligatoriamente, ese grupo es Traffic Sound. Para mi, sinceramente, el mejor grupo de Rock (con bastante psicodelia y latin) que existió en el Perú.

Comenzaron tocando covers, pero la calidad de estos, sumados a las características especiales de Traffic Sound (imagínense Fire de Hendrix, tocada con saxo!!!) hacían de ellos un grupo genial, y ellos lo sabían, empezaron a tocar en el famosoTiffany (luego llamado Galaxy) de San Isidro, en esa época en que las tocadas eras fiestas-concierto, debe haber sido (con el perdón de la palabra) algo DE LA PUTA MADRE!!!. Imagínense poder ver a su grupo favorito, y además menearse, demasiado increíble, fue esto lo que los llevó a conseguir un contrato para grabar varios discos de 45 que fueron posteriormente reunidos para su primer LP A Bailar Go-Go (1969).

Luego vino Virgin (1969 también) ya con puros temas propios, este disco es uno de los mejores discos por estos lares y para mi, el mejor de este grupo, donde se encuentran Meshkalina y Virgin.

Le siguieron Traffic Sound (1970, también llamado Tibet´s Suzettes) y Lux (1971).

Luego lo que siguió fue un concierto de despedida... en el Teatro Segura (gracias Velasco!!!), que cerró con una versión de Mr. Skin de 30 minutos!!! (casi más larga que In-A-Gadda-da-Vida y Diamond Sea JUNTAS!!!), para caer rendido, por supuesto, acabó no solamente con las palmas y lágrimas de un público eufórico, sino además, con su streeking respectivo (preguntenle a sus viejos...).

Traffic Sound fue el primer grupo peruano en hacer una gira latinoamericana, que incluyó Argentina, Brasil y Chile, países en los que, muchos años después (junto con Inglaterra y España) llegaron a editar un CD de Grandes Éxitos, lo cual nunca se hizo en el Perú (qué verguenza carajo, qué verguenza!!!).

Dato para los rockeros: El vocalista de la banda, Manuel Sanguinetti fundaría Radio Doble Nueve (la radio rrrrrock en Lima) en 1978.

Dato para los que comen sin tenedor ni cuchillo: Hace un par de años tocaron en una Cena-Show (para darle el old feelin´) a beneficio en Los Delfines, hubiera sido pajísima poder ir, pero cuando llame a averiguar me dijeron que SOLO el cubierto costaba US$80, cuando pregunte si podia llevar los míos o comer con la mano me dijeron que no.

Que tiene que ver Traffic Sound con La Gran Banda?: Pues Jean Pierre Magnet!!! Maestro saxofonista. Y en una de las bandas "raíces" de Traffic Sound, llamada Los Hang-Teens, el baterista era Diego García-Sayán (si, el ex ministro!).


Los Belking’s: “Hemos quedado en el recuerdo”


Cuando es buena, la música instrumental nos deja mudos. En ese sentido, la voz nunca fue tan deleznable como en un concierto de Los Belking’s. Ellos reaparecen mañana. Wilfredo Sandoval y Raúl Herrera, dos de sus miembros originales, nos reciben en pleno ensayo. El sonido de sus guitarras nos trae de vuelta a las épocas en que toda canción era el soundtrack de nuestras vidas. Porque la música del futuro se hizo hace cuarenta años.

Encontré un texto de Carlos Torres Rotondo, donde dice que ustedes debutaron en 1964 en el cine Riva Agüero de El Agustino, luego de que se presentara la bailarina ‘a gogó’ Midloni Nagashiro.

Wilfredo Sandoval (WS): Ella era una stripteasera (ríe). Nosotros tocábamos con un baterista, Kiko ‘La Serie’, y él era mayor que nosotros. Tenía 28 años y nosotros, 14. Él andaba en ese ambiente y logró que nos contrataran. Luego de que las chicas hicieron su striptease, nos tocó entrar. ¡Y nos moríamos de miedo! La gente se levantó y comenzó a silbar. Tocamos ‘Popotitos’, pero la chifla era tan grande que no se escuchaba nada.

¿Y qué hicieron?

WS: Nuestro baterista era más pilas, más mosca. Se soltó el cabello largo, se remangó los párpados como un diablo y gritó: ¡Ahhhh! Y la gente se asustó. “¡Toca Wipe Out!”, le dijo a Raúl. Kiko hizo su solo de batería, se puso diablo y la gente aplaudía a rabiar. Se olvidaron de las mujeres. Y afuera nos esperaba una ambulancia.

¿Una ambulancia?

WS: Sí, tomamos una ambulancia para que el tráfico no nos parara y pudiéramos llegar a Comas, donde teníamos otro concierto (ríe).

Ustedes dos estudiaron en el colegio Melitón Carvajal. Usted, Wilfredo, invitó a unos amigos a tocar a su casa, y estos llevaron a Raúl Herrera. ¿Así comenzó la amistad?

WS: Sí, yo a Raúl lo conocía de vista porque él tocaba en la estudiantina del colegio. Esa vez Raúl me pidió tocar música de los Beatles. ¡Yo ni sabía que existían! Era 1964. Yo conocí a los Beatles en Tacora, donde compré un disco 45 de ‘I want to hold your hand’ en alemán.

Raúl Herrera (RH): Aún no sabíamos tocar bien la guitarra, aunque a mí también me gustaban Los Panchos y los boleros de Los Tres Caballeros.

¿Sus padres nunca se preocuparon por el ambiente en el que se movían?

WS: No, siempre nos apoyaron. Parte del éxito de la música de esos años es que casi todos los padres estaban comprometidos. Recién hace diez años me enteré de la preocupación de mi madre, pero ella siempre me apoyó. Ni existía marihuana. Nos intoxicábamos con Coca Cola, hermano (ríe).

Sus madres les compraron sus primeras guitarras eléctricas.

WS: Sí, mi mamá me compró esa guitarra Fender celeste que tú ves ahí.

RH: Y mi madre me compró una guitarra italiana Eko en la Casa Osterling.

WS: Pero cuando comenzamos a tocar, veíamos que todos tenían bonitos ternos. Mi madre fue a Casa Él (Miraflores) y sacó a crédito nuestros sacos. Eran color mostaza.

RH: Como éramos flaquitos, nos quedaba (ríe).

WS: Claro, pero ahora a ti no te quedaría, Raúl (ríe).

La música de los Belking’s tiene mucha influencia de The Ventures.

WS: Raúl tocaba más Ventures. Él tenía sus discos. Y yo iba a su casa porque él tenía un equipazo de la patada. Él vivía exactamente a la espalda de la Embajada de Brasil.

RH: En aquella época, solo una vez al día pasaban una canción de Ventures en la radio. Y tenías que esperar al día siguiente para volver a escucharla.

No es como ahora, donde ya tenemos el iPod.

RH: Claro. Y como no había grabadora, en nuestras mentes teníamos que grabar las canciones y sacar así las notas.

WS: Eso explica lo que sucede hoy musicalmente. Ahora hay tanta facilidad que tu cerebro no trabaja. Ahora ves en el video la forma como se toca una canción, pero en ese tiempo tú tenías que imaginártela. Eso nos obligó a todos a ser creativos.

¿Es verdad que se pusieron Belking’s por una marca de whisky?

RH: En la esquina de mi barrio de Miraflores, una señora siempre sacaba su basura en una caja de whisky. Y ahí decía Belkin.

Vaya, sí que tomaban bastante en esa casa.

RH: No, no (ríe). Era la misma caja que utilizaban para la basura. El nombre Belkin lo apuntaba siempre en mi cuaderno. Y cuando quisimos darle un nombre al grupo –para no pelear– todos escribimos el nombre que queríamos en un papelito y lo pusimos en una caja. Al final, salió Belkin. Y Willy dijo que había que aumentarle a Belking’s para que sonara mejor (ríe).

Su representante les dijo en 1966 que debían ser un grupo instrumental. ¿Qué hicieron con su vocalista?

WS: Nadie quería darle la noticia. A nuestro baterista le dijimos: “Walter, tú que tienes cara de malo, dile”. Nuestro vocalista era Daniel Rosario, y Walter le dijo: “Daniel, sabes qué compadre, toma un sol para tu pasaje de ida porque el de regreso no va a haber, ya no vas a cantar” (ríe).

RH: Daniel falleció el año pasado.

Ustedes lograron grabar su primer 45 porque ganaron ese año un concurso de El Virrey, ¿no es verdad?

WS: Sí, la final fue con Los Dreams, en el cine Tauro.

RH: Y ese día ganamos porque teníamos más jale con las chibolas (ríe).

WS: Es verdad, tuvimos mucho apoyo de la colonia japonesa. Además, en esa época yo tocaba guitarra saltando un metro veinte. ¡Por Dios!

RH: Éramos jovencitos y saltabas.

WS:  Bueno, pero tú asaltabas, Raúl (ríe).

En 1967 conocen a Andrés Roque, quien ya tenía varias melodías en mente. Es más, lo llamaban ‘el Belking mudo’.

WS: Sí, porque él aportó muchos temas. Casi la mayoría son éxitos y de él es, por ejemplo, ‘Amor Imposible’.

A usted, Wilfredo, no le gustaba el título ‘Amor Imposible’ porque era cursi, pero Andrés lo había llamado así porque estaba ‘templado’ de la enamorada de un amigo suyo.

WS: Silvana era la chica. ¡Y era hermana de mi enamorada! (ríe). Andrés se le declaró, pero ella no aceptó porque ya estaba con otro chico. Pero estamos hablando de colegialas. Y recién me he enterado de esto hace cinco años. Silvana era simpática, hija de italianos, muy parecida a Sofía Loren.

RH: Pero ahora ya es abuelita (ríe).

Su canción más conocida, ‘Tema para jóvenes enamorados’, apareció en el lado B de su segundo disco de 45 de 1967. ¿No confiaban mucho en el tema?

WS: Lo metimos como relleno. Esa es la verdad. Confiábamos más en la canción del lado A, ‘Negro es negro’. ‘Tema para jóvenes enamorados’ es una composición de The Shadows, pero el tío de Walter Aray nos trajo la canción grabada por un grupo brasileño, Los Jet Black.

El rock tuvo mucho apoyo esos años en las radios. Hoy, más bien, la gran mayoría apuesta por la cumbia. ¿No creen que el rock ya pasó de moda?

WS: No, lo que yo creo es que Velasco nos hizo demasiado daño. Cortó el cordón umbilical que había entre los colegios, las matinales y las radios. Tácitamente se prohibió que los colegios organizaran esas cosas. Pero tampoco hubo un recambio generacional. La verdad es que también había grupos mediocres.

¿Cuáles eran esos grupos mediocres?

WS: Los Silverton’s y los York’s, a pesar de que el cantante de los York’s (Pablo Luna) era un ‘showman’ espectacular. Se tiraba, se volteaba de cabeza, arrojaba el micro al público. Era un show de la patada. Pero los músicos eran malazos, de octava categoría.

¿Y se llegaron a enamorar de alguna fan?

WS: Sí, una japonesa en mi caso. Y en el de Raúl también (ríe).

RH: Sí, pero la chica que fue mi enamorada terminó siendo la esposa de Walter, el baterista.

Caramba. Todo se compartía en el grupo.

WS: Sí, somos medio comunistas (ríe).

RH: En nuestros conciertos había muchas japonesitas en las primeras filas. Y yo tocaba la guitarra y las enamoraba (ríe). A la salida, ellas me invitaban a sus casas a tomar lonche. Así conocí a Olga y la invité a uno de los ensayos. Pero Walter le tiró lente y yo ya tuve que retirarme (ríe).

Usted fue un buen perdedor.

RH: Es que ya tenía otra japonesita por ahí (ríe).

¿Se han puesto a pensar en el día en que ya no estarán?

WS: Por supuesto, lo tenemos muy claro. Yo ya miro distinto. Quiero que los jóvenes nos perciban desde otra óptica. Los Belking’s van a dejar no menos de 90 canciones propias, de las que vamos a estar orgullosos toda la vida.

RH: Con lo que hemos hecho y queremos seguir haciendo, estoy conforme. Hemos quedado en el recuerdo.